UVA Y NA 2018

Uva: Tempranillo (30%), Merlot (30%), Bobal (20%), Garnacha (15%), Palomino (5%)

Tipo de Vino: Tinto sin crianza ( 6 meses en inox) 

Graduación: 13%

Vino sin D.o, Extremadura

P.v.p aprox: --

Valoración: 8.6 

13ºC, Rubí de capa media. Nariz de intensidad media/baja, Muy frutal (roja y negra maduras), floral, notas de monte y de regaliz. Cuerpo medio, ágil, acidez y taninos medios (finos), algo secante (agradable), nota vegetal, fresco y ligera calidez final. Retronasal frutal, frutos secos, persistencia media.
Al contrario que el resto de vinos que cato para el blog, si no me hubiese gustado, no lo hubiese publicado. ¿La razón?, es un vino para casa, artesanal, para él y sus amigos/as, no está a la venta. En cuanto a la valoración, es la misma que con cualquier vino que cato.
Un vino fruto de la inquietud y del amor por el vino, no se dedica profesionalmente a esto. Por eso, tiene un valor aún mayor para mi. Ni siquiera hay una viña como tal. Saca las uvas de diferentes parras diseminadas por los alrededores del Valle del Jerte, con lo que eso supone.
El nombre ya es toda una declaración de intenciones. Zumo de uva fermentando, sin mas aditivos, ni siquiera sulfuroso añadido. No es un vino perfecto, ni falta que le hace. La nariz no es del todo nítida, tiene (en nariz y en boca) la impronta de los vinos naturales (los amantes de estos vinos se lo rifarían, estoy seguro) pero es todo fruta, se bebe con facilidad, es amable, sabroso y placentero. ¿Acaso se puede pedir mas?.
Cuando cae en mis manos un vino así, cómo pasó en su día con aquel increíble La Alpina Peregrina 2014, siempre me pregunto lo mismo. Si hay gente puede hacer vinos así, de forma casera, con pocos conocimientos y medios, ¿qué clase de vinos nos estamos bebiendo en muchos de los casos?.
Trago largo, para beber sin sentido, enhorabuena y sobre todo, gracias.