ASTURIAS, PAIS DE LOS 40 QUESOS

Después de la excepcional cata/maridaje de quesos propuesta y dirigida por David Fdez en el marco de Salenor, se como deben de ser algunos quesos, de otros ni idea debido a mi ignorancia quesera.
El País de los 40 quesos es una perfecta (aunque exagerada) idea de divulgación de nuestra cultura quesera, tenemos muchos y buenos, aunque una perfecta idea a la par que estéril.
Estéril porque sorprende como por solo 18 € se puede uno poner hasta las orejas de quesos a veces difíciles de adquirir y que con esta oportunidad haya escasa asistencia a este acto cultural, algo nuestro que deberíamos cuidar y mimar, pero los asturianos somos como somos. El miércoles apenas seriamos unos 60, supongo que el jueves con presencia política, premios y demás, la asistencia sería mayor, ya sabemos lo que nos gusta a los asturianos (y no solo a nosotros) aparentar y salir en la foto.
La organización la calificaré de buena, salvo algunos matices como la falta de copas adecuadas para el vino y el tamaño del corte de los quesos, muy grande a mí entender. Buenos detalles los de la ensaladas y los postres para intentar (sin conseguirlo) equilibrar la balanza del exceso lácteo y colesterol.
Ahora bien, probar 40 quesos de una tacada es francamente imposible, yo, de buen y gran estomago, fui prácticamente incapaz de comer mas de un trozo y eso que desde el principio traté siempre de coger los mas pequeños. Algunos de los quesos que allí se degustaron diré que, no tenían nada que ver con el punto de maduración y/o estado de la cata de Salenor, no haré mas comentarios al respecto.
De mi ranking particular, del cual dejaré fuera el increíble Valles del Oso de pasta blanda (me gustó mas en salenor) y el siempre eficiente y riquísimo Beyos, para centrarme en otros muchos que no conocía.
El Atroncau Roxu (no me fijé en su elaborador, que pena), me gustó mucho, el picante aparece al final y no mata el sabor propio del Afogal Pitu, el Bedón mezcla de vaca y cabra con un regusto a avellanas (¿?), el Ovín ecológico, de textura blanda, quizá el que mas me sorprendió de sabor, el Collada de oveja, el Afumau de los Caseirinos, suave, ahumado y con regusto a manzana, el Xinestosu de vaca, curioso queso con un amargo final y ligeramente acido, el Cueva de Llonín de vaca , que me recordaba en forma y presencia al camembert, muy cremoso y tierno y el Leyrosa, de leche de cabra pasteurizada y cuajo animal de cabra, cremoso, mantecoso y persistente. Estos dos últimos fueron los que llegaron a mi “final”, decantándome por el Leyrosa.
Quizá habría organizar esta propuesta de otra manera, se que es complejo sacar adelante estas cosas y tampoco se que fin buscan los organizadores, pero no es posible degustar tanto en tan poco tiempo y también habría que cuidar un poco los puntos de maduración con los que se presenta alguno de ellos, aunque bien sabemos que en general se busca mas una buena fartura que una buena calidad, pero también es verdad que sino sabemos cual es la buena calidad quizá solo nos quede la fartura.
De todas formas mi total apoyo a este tipo de propuestas.